Cortesia de VIMEO
Después de disfrutar en Barcelona, España, de un espectáculo como éste, regresar a tu propia tierra de tantos ríos y playas, para enfrentarte con una crisis energética, que te limita el horario en que abren y cierran los centros comerciales, que cierra las taquillas de un banco para el fin de semana, que te impide disfrutar un cine donde sudas a chorros, luego buscar el auto en un estacionamiento oscuro, un racionamiento eléctrico que limita confor y calidad de vida, bloquea que te llegue el agua bombeada y otros servicios; repito, ver este video te lleva a pensar... que no estas viviendo sino sobreviviendo en Venezuela, que no estás en pleno siglo XXI, sino retrocediendo, un espectáculo así jamás sería posible con racionamiento eléctrico.
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